Madrid, 1933 - Santander, 2010.
Hijo del también arquitecto y pintor Joaquín Vaquero Palacios y de Rosa Turcios Darío, sobrina del poeta Rubén Darío. Dado este árbol genealógico, la vida de Turcios estuvo rodeada de una atmósfera artística desde su nacimiento.
En 1950 se traslada a Italia, donde estudia arquitectura compaginando la carrera con la práctica artística. Antes de finalizar estos estudios ya había realizado su primera exposición individual en Lugano.
Como pintor se sentía especialmente atraído por las técnicas y los grandes formatos de la pintura mural. Por otro lado, en su actividad escultórica incorpora formas y materiales heredados de su formación como arquitecto, trabajando habitualmente con hormigón y áridos. Ejemplo de ello es el Monumento al Descubrimiento de América de la Plaza de Colón de Madrid.
Su obra puede contemplarse en museos como el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de Madrid, el Centre Pompidou de París, los Museos Vaticanos, además de los espacios donde se localizan algunos de sus murales: Teatro Real de Madrid, Museo de Arquitectura de El Escorial (Madrid), Auditorio Príncipe de Asturias de Oviedo, etc.
Su prolífera carrera le otorgó reconocimientos como la Medalla del Senado de la República Italiana (1959) y el Primer Premio de Pintura en la III Bienal de París (1963). Fue también nombrado Académico de la Accademia Fiorentina delle Arti del Disegno y Académico de Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.